TÉCNICAS Y ESTRATEGIAS PARA ABORDAR EL ABUSO INFANTIL








         El espacio de cada niño es,  compartiendo mundos y espacios propios para construir mundos comunes y especiales, no es ese espacio en el que el niño se mueve, sino el espacio propio que cada niño tiene dentro de sí mismo, Loretta psicóloga especializada en intervenciones gestálticas, comenta que el espacio de los niños se ve reflejado en su respiración, esto debido a que un niño que posee un poco capacidad de respirar tiene poco espacio dentro de sí, y entonces, por ende, habrá poca fuerza para afrontar lo que tenga que afrontar y para decir lo que tenga que decir. (Cornejo Parolini, L. Z. (2012).

           Debido a su forma de trabajo y las diferentes herramientas que ella utiliza en la clínica, tiene mejor pronóstico las terapia beneficio para los terapeutas que tratan con niños abusados. 

“Estamos aquí para aprender a sentirnos mejor y a cuidar de nosotras(os), eso lo vamos a realizar por medio de varias reuniones que efectuaremos. También podemos aprender a prevenir que alguien nos vuelva a hacer daño”. 

La autora Gioconda Batres (1999) propone estas frases que ayudan en la realización de técnicas para intervenir con niños y niñas abusados sexualmente. Ella se enfoca específicamente en el trabajo en grupo con el fin de la erradicación de la violencia sexual  hacia los niños(as), además también apoyar a los (as) terapeutas que puedan llegar a tener en sus manos la valiosa vida de los niños y niñas que han sufrido violación. 


INFORMACIÓN IMPORTANTE:

En sus aportes (López, 2017) Propone una serie de diferentes técnicas a utilizar en una primera entrevista. 

Técnica especular: también llamada la técnica del espejo o la técnica del eco, consiste en reflejar ciertos comportamientos no verbales del entrevistado con el objetivo de facilitar el seguimiento de la conversación; sobre todo, cuando el entrevistado se encuentra paralizado sin saber qué decir.

Focalizar el problema: con frecuencia, en su relato el entrevistado se deriva en la narración de detalles de anécdotas triviales (tales como si tal o cual persona ese día tenía el pelo atado o si se lo había cortado con tal o cual peluquero, etc.) que se podrían llegar a extender durante todo el tiempo de la entrevista. Como es sabido, ante sus conflictos, las personas funcionan implementando mecanismos de defensa porque temen hablar del tema importante; y es por ese motivo que, justamente en estos casos, la función del entrevistador será hacer una revisión de sus síntomas como un modo de hacer foco en su problema.

No hacer valoraciones críticas: el requisito fundamental en toda comunicación humana es saber escuchar; y para saber escuchar verdaderamente es necesario no juzgar ni hacer valoraciones críticas de nuestro interlocutor. De esta manera, mostrarnos interesados o no por aquello que alguien nos esté contando marcará la diferencia para que continúe profundizando en su historia o para que, por el contrario, se termine cerrando más rápido de lo previsto.

Habilidades analíticas: entrevistar a una persona sirve de poco si no se sabe escuchar entre líneas, por “debajo” de lo que dice. Existe un discurso consciente y un discurso inconsciente en el relato de cualquier entrevistado y saber descifrarlo hará la diferencia. Los psicoanalistas han sido quienes han desarrollado la técnica de la escucha de la verdad inconsciente a través de las incongruencias, contradicciones y otros actos fallidos verbales.  

Habilidades en la toma de decisión: tener el carácter y saber improvisar decisiones en la medida que las circunstancias lo requieran siempre es un requisito fundamental a la hora de entrevistar a víctimas de abusos. Muchas veces, una pregunta puede disparar en ellos respuestas, conductas o estados emocionales que pueden ir desde la vergüenza o la incomodidad hasta el nerviosismo, la ansiedad o una intensa angustia.

Autoconocimiento: cuando se pretende entrevistar a una persona sin conocerse lo suficientemente a sí mismo se corre el riesgo de hacer proyecciones de la propia historia, con lo cual se termina siendo subjetivo y cayendo en errores de interpretación e, incluso, de diagnóstico.

Ecuanimidad: entrevistar a personas bajo situación de traumas severos conlleva, generalmente, soportar mucha presión y una gran carga de gran responsabilidad la cual no todos los profesionales llegan a soportar. El entrevistador debe tener una personalidad muy fuerte, firme, emocionalmente estable y segura de sí misma; y en el caso de sentirse inseguro o temeroso frente a un caso siempre se recomienda realizar la derivación correspondiente.

Silencios instrumentales: si bien hay muchos que no soportan este tipo de pausas en las conversaciones, lejos de ser el producto del no saber qué responder o qué decir del entrevistado este tipo de silencios suelen implementarse para facilitar el diálogo y la reflexión conjunta.

Comentarios confirmatorios: son comentarios que se realizan con la finalidad de expresar aprobación y alentar a continuar el relato. Por ejemplo: “Efectivamente, usted tiene razón. Yo también creo que su problema puede estar relacionado con el padre de su hijo”.

Retroalimentación comunicacional: no se trata de juzgar al entrevistado sino más bien de repetirle verbalmente y de forma resumida una información que ha dicho para asegurarnos de que, efectivamente, no lo hemos entendido mal. 

Por ejemplo: “Cada vez que usted grita, luego, esa noche su hija termina haciéndose pis en la cama”.

Señalamientos: consisten en subrayar y/o evidenciar un comportamiento, un problema o un dicho que el entrevistado ha expresado y sirven para que tome conciencia de lo que se le señala.

Interpretaciones: el entrevistador deduce causas y consecuencias de los hechos narrados, de las conductas no verbales y paraverbales del entrevistado como un modo de profundizar en el motivo de consulta que lo ha convocado al encuentro. Por ejemplo: “Quizás se sienta paralizado cada vez que lo ve porque en su infancia haya sufrido algún tipo de maltrato, ya sea físico, o psicológico de su parte”.

Aterrizaje en paracaídas: el entrevistado viene hablando de un determinado tema y es el entrevistador quien de manera directa y sorpresiva procede a realizarle una pregunta o un comentario con el objetivo de ayudarlo a desbloquear un área determinada de su vida que consciente o inconscientemente estaba evitando porque quizás temía o, simplemente, no sabía cómo afrontarla.

Técnicas de presión: consisten en recordarle al entrevistado disperso que falta poco tiempo para que concluya la entrevista y que, por ejemplo, es necesario que vaya redondeando su relato.

Técnicas de confrontación directa: consisten en hacerle notar al entrevistado las contradicciones entre sus dichos actuales con datos que pudo haber verbalizado en el pasado, o hacerle tomar conciencia respecto de la incoherencia entre sus dichos y el lenguaje de su cuerpo. Confrontar datos puede resultar una tarea un tanto incómoda pero siempre es necesaria en el marco de una entrevista cuyo objetivo es realizar un diagnóstico de la persona o de la situación en la que se encuentra.


Detectar limitaciones: detectar, en la medida en que sea posible, las limitaciones tanto a nivel intelectual, así como a nivel conductual y neurológico de nuestros entrevistados será de suma importancia a la hora no solo de establecer un buen rapport sino también de no vernos frustrados con expectativas inadecuadas al momento de comunicarnos. También, será fundamental detectar nuestras propias limitaciones como entrevistadores, ya que a diario pueden verse profesionales de buena fe que se proponen trabajar con casos de abuso sexual de niños/as y más tarde desisten, superados por el estrés que les genera.

Recuperar recursos: detectar y/o recuperar recursos y cualidades positivas del entrevistado resulta de vital importancia para investigar acerca de su mundo. Ocasionalmente, las personas víctimas de traumas severos presentan una apariencia de poca valía que no reflejan para nada con el alto grado de inteligencia que en realidad tienen. Muchas veces, en un principio parecen con grandes dificultades para expresarse oralmente; y sin embargo, cuando se les brinda la suficiente confianza, se largan a hablar con un excelente y refinado vocabulario.

Liderar con el lenguaje no verbal y paraverbal: se trata de hacer intervenciones desde las posturas corporales y los tonos y ritmos de voz con el objetivo de destrabar bloqueos en el habla. El entrevistador afina, agudiza su voz y levanta las cejas demostrando empatía cuando su paciente de cinco años se pone a llorar.

Utilizar un lenguaje transderivacional: se trata de tipos de enunciados que utilizará el entrevistador con el objetivo de estimular a su entrevistado para evitar las respuestas directas, y ayudarlo así a emprender una búsqueda de sentido en su interior.

Utilizar ambigüedades: el entrevistador recurre a la utilización de palabras y frases confusas o ambiguas con el objetivo de estimular en su entrevistado posibles despliegues asociativos que lo puedan llevar a pensar en distintas alternativas de significancias.

Utilizar significados derivados: el entrevistador se maneja con enunciados que si bien no pronuncia de forma directa se hallan implícitos en aquello que dice.





ALGUNOS EJERCICIOS



Por su parte (Cornejo Parolini, L. Z. 2012) Propuso técnicas gestálticas para poder trabajar con las emociones y sensaciones corporales para trabajar en las sesiones y poder crear un buen rapport o una buena relación con el paciente, entre las más destacadas podemos mencionar.

Así represento mi mundo

Materiales. Rollo de papel, Crayones, marcadores gruesos de color plata y dorados

Consigna: El papel tendrá el tamaño que tú crees que tiene tu mundo. Una vez que ya lo tengas, trata de representar con los crayones y los marcadores que tú sientes que es tu mundo.

Baile Emocional

Las posibilidades de esta técnica van más allá de un trabajo emocional. También se utilizan las sensaciones, los pensamientos, figuras corporales o las experiencias. La idea es usar el baile como una manera de expresión y una forma de ampliar nuestra conciencia de aquello que consciente o inconscientemente estemos trabajando. Se trata de facilitar un encuentro con el baile y darle a lo que se esté trabajando un lugar, una expresión y un sentido.

Esta actividad puede empezar con el objetivo de trabajar por ejemplo una emoción o una experiencia en concreto; a partir de ahí se buscan la música y los movimientos que los representen. También puede empezar con una música o unos movimientos concretos y desde ahí descubrir cómo resuenan en cada uno. Se puede usar cualquier tipo de baile para aplicar esta técnica: clásico, jazz, funky, bailes de salón, etc. Lo importante es usar el tipo de baile y el tipo de música que le guste a la persona o, lo que es lo mismo, que le transmita a la persona.


Dinámica para un niño con recuerdos contaminados

Se considera que el niño(a) se encuentra contaminado por el recuerdo de cómo lo hizo o lo vivió y no ser reflejo tan fiel de lo que está viviendo ahora.

 ¿Qué técnica utilizaría yo para un niño de unos 7 años que no habla en la sesión (dinámica, materiales, por qué lo haría…)? ¿Qué técnica utilizaría para un niño que ya ha ido a varios psicólogos y ya sabe lo que le piden?

  • Material: Dos muñecos y cualquier otro juguete, papel, lápices de colores, etc., que pueda utilizar el muñeco paciente.

  • Dinámica: Yo como terapeuta puedo dirigir al muñeco-terapeuta en niños más pequeños y al muñeco-paciente en los más mayores. Representaremos la entrada en la consulta, la presentación y el desarrollo la terapia. En función de cómo avance el juego, se puede introducir el dibujo u otros materiales que el niño usará como si fuera el paciente.
  • Por qué lo haría: Es una forma de valorar lo que el niño ha hecho y ha aprendido hasta ahora en sus otras terapias. Al trabajar desde una perspectiva diferente el niño estará más atento e interesado que si le pedimos que repita ejercicios o pruebas que ya ha realizado repetidas veces con otros terapeutas. Seguramente también el resultado será más original y genuino que si repite algo hecho anteriormente.


La doma de mi animal salvaje

Ejercicio grupal 

Objetivos:

  • Tomar conciencia de los sentimientos: enfado, rabia, ira…, a través de la proyección de nuestra parte "salvaje/instintiva".

  •  Ver cómo entendemos qué significa ayudarnos a nosotros mismos y a los demás a domar su parte salvaje.

  • «¿Nos resulta más fácil domar o ser domados?» y "¿qué implicaciones tiene la preferencia por cada rol?".

Materiales: Ninguno en especial, solo una sala con espacio para moverse con libertad.

Consigna: Pensemos en qué animal nos convertimos cuando nos enfadamos mucho, cuál es el animal salvaje que nos sale de dentro.

Desarrollo: cada participante elige el animal con quién más se identifica cuando tiene estos sentimientos de enfado, ira, etc., y después comenta los motivos de su elección, los aspectos con los que se identifica, cómo cree que le perciben los otros.

Después se pasa a la dramatización: por turno cada participante saca su animal, mientras los demás intentan domarle o le ayudan a calmarse.

Después se hace una ‘rueda’ donde cada uno comenta cómo se ha sentido, sí le ha resultado más fácil ser animal o domador, si se ha podido calmar, si ha percibido ayuda del exterior…, etc. Y cómo todo ello se pone en relación con lo que le ocurre en su día a día.

¿Cómo me veo? ¿cómo me ven?

Forma de hacerlo: Grupal

Objetivos:

  •  Comunicarnos y expresar lo que más y menos nos gusta de los otros, y cómo nos sentimos haciéndolo.
  • Tomar conciencia y aceptar la visión de los demás sobre nosotros. Nos sorprende/no nos sorprende lo que nos dice.
  •  ¿Cuál es la parte que nosotros hemos generado, provocado, para transmitir esa imagen?
  • Lo que más/menos nos cuesta decir.
  • Lo que más/menos nos cuesta reconocer.

Materiales: Dos hojas grandes tipo doble oficio para cada participante; una quedará por delante y otra por detrás (se pueden atar por los extremos y colocarla sobre los hombros). Materiales para dibujar o pintar: rotuladores, pinturas de dedos, ceras.

Consigna: 

Pensemos en las cualidades, valores que vemos en cada miembro del grupo y escribamos en la parte delantera una palabra, un dibujo, un símbolo que lo exprese. Hagamos lo mismo con lo que menos nos gusta y se lo ponemos en la espalda.
Pensemos en lo que percibimos de cada miembro del grupo cuando nos relacionamos con él/ella personalmente y escribamos una palabra, símbolo o dibujo que lo exprese, por la parte delantera.
Después pensemos en cómo vemos a esa persona dentro del grupo, a quién representa dentro del grupo; del mismo modo escribamos una palabra, símbolo o dibujo que lo exprese.



EL MANUAL DE GIOCONDA 
HERRAMIENTA VALIOSA

         Por otro lado, Batres (1999) En su manual divide en 14 sesiones su contenido de técnicas y estrategias para abordar el abuso infantil, el contenido abarca aspectos importantes para trabajar con los pacientes. Este incluyen actividades, recomendaciones, herramientas útiles y ejemplos de cómo abarcar cada uno de los temas. es experta en el abordaje del abuso sexual. Ella es la creadora de esta valiosa herramienta para el trabajo con niños y niñas, entre 7 y 12 años, que han sido abusadas sexualmente. Este es un manual elaborado diversos autores que contribuyeron a la elaboración del mismo.

Sesión 1: Presentación y establecimiento de las reglas y de la alianza terapéutica 

La primera sesión debe realizarse en un ambiente de cálido y que brinde seguridad; los terapeutas deben expresarse en forma clara, comprensible, respetuosa, según la edad, nivel educativo y desarrollo o capacidad cognitiva.
Se deben crear grupos (6-8 integrantes) con niñas(os) del mismo sexo, entre los 7 y 12 años. Los grupos mixtos no son recomendables. Y para finalizar la sesión se le pide que conteste ya sea de forma oral o escrita.

  • Una cosa que me gusta es 
  • Una cosa que me disgusta es 

Sesión 2: Confianza y apoyo 
Se realizarán las técnicas necesarias para establecer confianza debido a que este es un momento fundamental para construir una red de apoyo externa.

Sesión 3: ¿Cómo se sienten?
Se les solicita que expresen sus sentimientos proporcionándoles un ambiente seguro y confiable.

Sesión 4: Mitos y realidades. El desarrollo del NO
En esta sesión es útil usar la reconceptualización cognitiva ya que por medio de esta se reflexionan los mitos para luego descartarlos. El fin es que el abuso no sea estereotipado y que no existan culpas y distorsiones cognitivas.








Sesión 5: La revelación
Para esta sesión se espera haber fortalecido suficientemente a los niños (as) en sus destrezas, su capacidades de búsqueda de apoyo y sus habilidades. Ya se les debe haber brindado la información correcta sobre el abuso sexual.
Hablar sobre el abuso sexual además de ser un derecho, es necesario y es un proceso terapéutico efectivo.



Sesión 6: Prevención de futuros futuros 
En esta sesión es donde se les brinda la información pertinente a las víctimas para que puedan comprender que no es bueno que el abuso se repita o recibir maltrato físico de otros.

Sesión 7: Valorando el género 
Equipar a los niños(as) con el conocimiento adecuado para que conozcan sus derechos y se valoren como personas contribuye a que se produzca una ruptura en las desigualdades que permiten y promueven estas muestras de poder y la desvalorización ellos. 

Sesión 8: El enojo 
Cuando una persona es traicionado por alguien a quien se quiere, en quien se tiene confianza y/o quien estaba supuesto(a) a cuidarlos (as), es común que se despierte un gran sentimiento de enojo hacia ellos.
En este caso se debe validar el sentimiento y hacerles ver que está bien, pero que deben dirigirse a quien(es) les han) dañado y no hacia otras personas.

Sesión 9: El poder
Cuando las víctimas son invalidadas, aprenden que ellos no serán escuchados y suele desarrollar un sentimiento de ineficacia. 
Para eliminar ese sentimiento de ineficacia las víctima deben aprender a reconocer estos mensajes y les corresponde sustituirlos por mensajes positivos, esta es una parte valiosa del proceso de sanación.

Sesión 10 y 11: Su cuerpo
Con frecuencia creen de alguna manera que sus cuerpos han sido dañados físicamente, o que sus cuerpos se han ensuciado por el abuso sexual.
En esta etapa es importante que los niños(as) aprendan a conocer mejor sus cuerpos, que lo quieran, que lo acepten y aprendan a cuidarlo.

Sesión 12: Autoestima
En esta sesión del proceso la autoestima debe haber mejorado. Pero es indispensable una sesión dirigida solamente a fortalecerla.

Sesión 13: El futuro
Cuando el proceso se ha concluido la mayoría de las víctimas salen victoriosas, pero habrán algunas que todavía necesiten continuar, por algún tiempo, en terapia individual. Se les informa sobre la posibilidad de regresar por ayuda si fuese necesario. 
Para un seguimiento grupal efectivo G. Batres recomienda dos sesiones cada tres meses. 
En la última sesión se realiza la graduación, para esta se les solicita que lleven una carta de despedida para los compañeros y para la pareja de terapeuta.

Sesión 14: Graduación
Este día debe ser muy especial, todo debe ser positivo y alegre; se debe haber planificado entre todos(as) con la idea de pasarla de lo mejor. 













REFERENCIAS.

  • Batres, Gioconda. (1999). Manual para el Tratamiento Grupal del Incesto y Abuso Sexual Infantil. ILANUD. San José, Costa Rica.



Comentarios

  1. me pareció muy importante este articulo porque muestra como los niño van creciendo y como demuestran que han superado los diferentes traumas que viven a lo largo de su vida. Hay que recordar que los niños tienen un alma pura y ninguna persona tendría que hacerles daño o tocarlos de una mala manera así que este articula muestra los diferente puntos que vive cada niño y como los tienen que superar. MUY INTERESANTE

    ResponderEliminar

Publicar un comentario